Al igual que la infancia, la pubertad o la madurez, la menopausia es una etapa más en nuestra vida, la cual debemos de afrontarla con naturalidad y, llegado el momento, darle la bienvenida con positividad y alegría. Hoy te mostramos las 5 preguntas más frecuentes relacionadas con la manera de afrontar la menopausia.
¿La menopausia solo es cosa de mujeres?
Evidentemente, la menopausia afecta solo a la mujer. Sin embargo, el entorno juega un factor muy importante. Socialmente, la menopausia está ligada a una serie de connotaciones negativas ligadas a los cambios físicos y emocionales de la mujer. Por ello, es muy importante dejar de lado los prejuicios y falsos mitos para dar paso a la empatía y comprensión. El apoyo emocional y afrontar con naturalidad los síntomas manifiestos son los mejores compañeros para afrontar esta nueva etapa.
¿Cuáles son los cambios físicos que tiene una mujer con menopausia?
Aunque cada mujer es diferente y los síntomas no son idénticos en todas las personas; se podría decir que estos 5 son muy comunes. Todos ellos son causados por la carencia de estrógenos:
- Disminución del flujo vaginal.
- Piel más frágil: se vuelve más fina y seca.
- Osteoporosis: los huesos se vuelven porosos y susceptibles a las fracturas.
- Subida de peso: Durante la menopausia una mujer puede ganar de uno a tres kilos.
- Problemas dentales: incrementa el riesgo de perder dientes o de desarrollar gingivitis o piorrea.
¿A qué cambios psicológicos o emocionales se enfrenta una mujer en la menopausia?
- Duelo: el hecho de asomarse al espejo y comprobar que ya no son las mujeres jóvenes de hace unos años, en una sociedad que rinde culto a la juventud, puede provocar una etapa de duelo, por aquello que perdieron. Comienza ahora una etapa de declive que, social y personalmente es difícil de afrontar.
- Síntomas depresivos: El descenso de hormonas femeninas; estrógeno y progesterona, puede llevar a la mujer a estados depresivos. Pueden manifestarse síntomas como falta de interés o placer en algunas actividades, ganas de llorar, insomnio, etc.
- Síndrome del nido vacío: Entre los 45 y 65 años, no solo la menopausia juega malas pasadas a las emociones. Esta atapa suele coincidir con el final d la crianza y, en muchos casos los hijos se emancipan o independizan. En este tiempo, suelen aflorar sentimientos como nostalgia, añoranza, etc. Es el momento de afrontar el reto de volver a encontrarse con una misma y su pareja.
¿Cómo puedo afrontar la menopausia?
Llevar una vida sana y practicar hábitos de vida saludables puede ayudarte afrontar de manera positiva este nuevo ciclo. Para ello es recomendable:
- Mantener una alimentación equilibrada. Saber cuáles son los alimentos recomendados y cuáles no puede ayudarte.
- Recomendados: Consuma mayor cantidad de frutas, verduras, leguminosas, fibra y de carne magra (de aves de corral). Consuma productos lácteos (leche, queso, yogur) ya que éstos aportan una cantidad suficiente de calcio. Dé preferencia al aceite de oliva y a los aceites vegetales (de sésamo o ajonjolí, de linaza).
- No recomendados: Evite las comidas ricas en grasa: carnes grasosas, embutidos, productos lácteos no descremados, postres, galletas, panecillos, pasteles, frituras, etc.
- Eliminar bebidas alcohólicas: El consumo de alcohol no es nada recomendable durante la menopausia. Disminuir el consumo de alcohol controla los riesgos de pérdida de calcio.
- Evitar el tabaco: ya que éste aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares, osteoporosis y cáncer. Las mujeres que fuman presentan cuadros de menopausia precoz.
- Vivir la sexualidad: Debido a la resequedad vaginal, es recomendable utilizar lubricantes durante las relaciones sexuales.
¿Y qué pasa con los sofocos?
Los sofocos son muy comunes al hablar de menopausia. Para ellos, es conveniente:
- Consumir bebidas frías y tratar de evitar las comidas demasiado calientes.
- Mantener ventilada su habitación.
- Utilizar aire acondicionado o un ventilador en verano.
- Evitar las bebidas alcohólicas.
- Evitar el café y el té.
- Utilizar ropa hecha de algodón o de tejidos naturales.
- No abrigarse en exceso en invierno. Ponerse la ropa "por capas" para que pueda quitarse alguna prenda en caso de que tenga un sofoco.
A pesar de contar con todas estas indicaciones, no olvides, ante cualquier duda, consultar con tu médico. Es muy importante la visión de un profesional de la salud.